La marca estadounidense Specialized ha presentado una evolución de su reconocida gama de sillines S-Works Power con tecnología Mirror, fabricada mediante impresión 3D. Esta nueva versión apuesta por una estructura reticulada que optimiza la distribución de la presión en la zona de apoyo, con el objetivo de mejorar el confort de los ciclistas, especialmente durante recorridos prolongados.
El corazón de este sillín reside en un proceso de fabricación aditiva que emplea un polímero líquido transformado en una compleja malla gracias a la impresión 3D. Este diseño permite crear zonas con distintos niveles de rigidez y flexibilidad, adaptándose de manera precisa a la anatomía del ciclista y amortiguando mejor las vibraciones. Según Specialized, el modelo proporciona un 26% más de absorción de impactos que los sillines de espuma tradicional.
En cuanto a prestaciones, el nuevo sillín mantiene un peso reducido —alrededor de 190 gramos— y un diseño que favorece una postura eficiente y cómoda, tanto en esfuerzos intensos como en rodajes largos. Su carcasa de carbono y los raíles de titanio contribuyen a su ligereza y resistencia.
Specialized lleva desde 2020 apostando por la tecnología Mirror, con la que ya había innovado en sus sillines Power. La evolución que ahora presentan reafirma el compromiso de la marca con la personalización y el empleo de materiales de última generación. Aunque su precio ronda los 450 €. La compañía confía en que los ciclistas que buscan un rendimiento superior y la máxima comodidad encontrarán en este sillín una inversión justificada.
La llegada de este producto refuerza la tendencia creciente de incorporar la impresión 3D en componentes de bicicleta. Con el propósito de lograr soluciones más ergonómicas y adaptadas a cada usuario.
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